En bus o a pie, familias enteras salen hacia la vecina Colombia. Unos se quedan y otros siguen rumbo al sur. Muchos han sido alojados en refugios, algunos acampan en terrenos baldíos y parques o viven de donaciones.

La ayuda humanitaria en los puestos limítrofes permite que los migrantes lleguen a su destino. En el lugar piden refugio para poder estar en el país de forma legal.

Desde la noche del viernes llegaron a la frontera los buses que trasladaron a los migrantes desde Rumichaca hasta Huaquillas. Aunque el flujo de viajeros bajó por el requisito del pasaporte, se teme que en los próximos días repunte.

La medida de pedir pasaporte a los ciudadanos venezolanos impactó en la opinión pública. Según expertos en movilidad, la disposición es contradictoria.